El asesor educativo canadiense, Andrés Eloy Escarrá, se encarga de orientar a todas aquellas personas que desean cursar estudios fuera del país, brindando charlas y asesorías en las que explica las ventajas y beneficios de estudiar en el exterior, específicamente en las ciudades de Toronto y Vancouver.
Para poder materializar el sueño de cursar estudios en el exterior, qué mejor que buscar un “consejero” que pueda orientar nuestros intereses. El asesor educativo, Andrés Eloy Escarrá, trabaja parala Asociación VenezolanaAmericana de Amistad (AVAA), y su labor está inmersa en la orientación de todas aquellas personas interesadas en realizar algún tipo de estudio fuera de Venezuela.
En principio, el país que oferta como primera opción es Canadá, ya que además de ser su trabajo, Escarrá comenta que “es un país económicamente estable”, que cuenta con cientos de colegios, universidades e instituciones calificadas para brindar estudios a extranjeros y además, posee gente dispuesta y capacitada para recibir personas de otros lugares del mundo, siendo uno de los destinos más solicitados por los estudiantes.
Según estadísticas de una de las instituciones canadienses: International Language Academy of Canada (ILac), cuentan con 1/3 de estudiantes latinoamericanos, 1/3 de estudiantes de Europa y Medio Oriente y 1/3 de estudiantes de Asia. Por lo general, en el plano latino un 36% de ese tercio prefiere Toronto y otro 36% Vancouver. Dice el asesor educativo: “Ahorita se está moviendo mucho la preferencia de países en función del precio y, a veces, también en función de la cercanía”.
Escarrá explica, en cuanto al tipo de estudios a realizar que “básicamente la oferta no es de algo en específico”. Existe gran variedad de estudios en el exterior, como educación primaria y secundaria, estudios universitarios de pregrado, postgrado, diplomados, practicas profesionales, cursos cortos, pasantías… y lo que no puede faltar, los cursos de idiomas, que son los mas solicitados.
En cuanto al estudio de los idiomas inglés y francés en Canadá, suelen ser el principal interés de los jóvenes: “No porque no tengamos buenos programas de ingles en Venezuela, sino porque no es lo mismo estudiar ingles en un país de habla inglesa, donde se está obligado a hablar el idioma nativo todo el tiempo”, expone.
Debido a las crisis económicas y las situaciones mundiales los costos varían según los estudios, de acuerdo al país que el estudiante prefiera. Un estimado en cuanto a los estudios del idioma ingles en Vancouber o Toronto, tienen un aproximado de $11.500 – $15.000 (canadienses), calculándose de22 a32 semanas de estadía (año académico), e incluyendo algunos otros gastos. Pero en definitiva, de acuerdo al tipo de estudio y al lugar de destino los precios cambian.
Las instituciones que ayudan al estudiante a tramitar el proceso, ya sean canadienses o estadounidenses, ofrecen algunos beneficios, como seguro de vida privado, “que suele ser más económico con ellos”, y por otra parte la gestión del domicilio, que puede o no incluir las tres comidas, dependiendo de lo que decida el estudiante, indica Escarrá.
Los más de 20.000 estudiantes que han realizado su sueño de viajar al exterior orientados por la AVAA: “Por lo general terminan yéndose a los home state o casas de familia”, ya que además de poder estar en constante ejercicio de la lengua inglesa, pueden sentirse en familia y además, efectuar el pago de estadía mensualmente que es más factible, indica el asesor con seis años de experiencia.
Las familias que buscan las instituciones cuentan con los requerimientos de la persona, ya que se desarrolla “una labor de coordinación en pro del beneficio del estudiante”, pues, cualquier solicitud o petición de, por ejemplo, una familia cristiana, o una casa sin animales es gestionada. Suele suceder que “el estudiante termina desarrollando lazos con la familia”, agrega Escarrá.
“Otra opción son las residencias estudiantiles, pero el pago es anual”, lo que dificulta la cancelación del costo, valorada entre $6000 – $8000 anuales, por lo que no es muy recomendada. Una última alternativa es el alquiler de un apartamento entre un grupo de tres o cuatro personas, que está valorado entre los $700 – $900. “Al final, todo depende de lo que quiera el estudiante”, dice.
El estudiante es el que tiene en sus manos la búsqueda de nuevas fronteras, lo que permite en muchos casos, “teniendo una crisis de empleo bien interesante” en el país, que muchos consideren una opción el estudiar fuera y obtener especializaciones, ya que así creen tener más oportunidades de regresar y optar por una mejor fuente de ingleso, “cosa que es cierta”, menciona el asesor educativo.
Todo esto es solo una ventana a un gran horizonte de oportunidades, para estudiar en el exterior y poder adquirir otro tipo de conocimientos y experiencias, que enriquezcan al venezolano como persona y como ser integral. Logrando así que el joven se prepare mucho más para luego regresar y contribuir a la formación nuestro país.
Feria Educativa Internacional Expo-Estudiante 2011
Es un evento organizado porla Asociación VenezolanaAmericana (AVAA) y Business Marketing International (BMI), que celebró este año su vigésima edición, contando con más de 50 instituciones extranjeras que estuvieron presentes en el evento.
Explica Andres Eloy Escarrá que “básicamente, la gestión de la feria es que los estudiantes interesados en cursar estudios fuera de Venezuela tengan información de primera mano de las mismas instituciones”.
La Feria EducativaInternacional Expo-Estudiante 2011, que se realizó en Caracas, Barquisimeto y Valencia durante la primera semana del mes de octubre, contó con la participación de centros de estudios, universidades e institutos de idiomas de Alemania, Canadá, España, Estados Unidos, Francia, Holanda, Suiza, Colombia y la oficina local dela Latino AustraliaEducation.
El año pasado, el evento contó con la asistencia de 4000 personas. Este año asistieron aproximadamente unas 6000 personas sólo en Caracas, y alrededor de 8000 personas entre las tres ciudades.
Esta feria no “promueve la fuga de talentos”, más bien contribuye a la formación de agentes de cambio, que se consoliden cognoscitiva y empíricamente. “Al final, la intención es que se queden en el país, ya sea formándose afuera o formándose acá para contribuir con Venezuela”, agrega el asesor educativo canadiense, Andrés Escarrá.
Bárbara Chirino
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